Se sacó fotos con el público, firmó pelotas y saludó con una gran sonrisa. Fue un día soñado en París para Román Burruchaga, que a los 22 años y con un largo trajinar en el universo de los challengers acaba de dar un gran paso en su corta carrera. A los 22 años, el hijo de Jorge, una de las grandes glorias futbolísticas de la Argentina, consiguió el ingreso al cuadro principal de Roland Garros, en lo que será su primera participación en un Grand Slam. Lo hizo luego de una esforzada semana en la qualy, donde este viernes sorteó el tercer y último obstáculo, al vencer al eslovaco Jozef Kovalik (31 años, 146°) por 4-6, 7-6 y 6-4. De esta manera, Burruchaga, hasta hoy 145 del ranking, se suma a los siete varones y tres mujeres de nuestro país que a partir del domingo competirán en el torneo ícono de polvo de ladrillo, el Abierto de Francia.
Entrenado por Leonardo Mayer, Román tuvo su gran semana al vencer primero al chino Juncheng Shang por 6-4 y 7-6 (7-5), y luego se deshizo del japonés Yasutaka Uchiyama (214°) por 6-2 y 6-4. Hasta aquí, Burruchaga sólo había jugado la clasificación de un Grand Slam (en enero, en Australia), pero no había podido superar la primera ronda.
En febrero pasado, Burruchaga tuvo un inolvidable debut en el circuito ATP. En Córdoba, tras superar los dos partidos de la clasificación, derrotó a Diego Schwartzman por 6-1, 4-6 y 6-4 (Jorge presenció en una tribuna ese bautismo triunfal de su hijo). Luego cayó en los octavos de final ante el alemán Yannick Hanfmann.
Diestro, de 1,80m y revés de dos manos, Román cumplió su sueño y podrá seguir derramando sobre el polvo de ladrillo francés todo su empeño. Ambiciones le sobran.
Con Burruchaga serán once los argentinos que estarán en el torneo más importante sobre polvo de ladrillo, uno de los cuatro grandes del circuito. Más tarde se sabrá qué le depara el sorteo, pero para Román es un paso gigante en su carrera. Estos son los cruces ya confirmados para los tenistas de nuestro país:
LA NACION