El oficialismo apura en Diputados el despacho de comisión para avanzar con el plan de privatización de Aerolíneas Argentinas con un ambicioso objetivo de tratarlo en un trámite exprés la próxima semana en el recinto. Sin embargo, el kirchnerismo y parte de la oposición dialoguista buscan trabar la maniobra impulsada desde la Casa Rosada.
Tal como había anticipado Clarín, el debate sobre la venta de la aerolínea de bandera se precipitó a partir de las salvajes protestas que llevan adelante los gremios aeronáuticos, encabezados por APLA, la asociación de pilotos que lidera Pablo Biró, fuertemente cuestionado por el Gobierno.
Por eso, el oficialismo juntó a sus aliados y convocó a un plenario de las comisiones de Transporte y de Presupuesto, que presiden, respectivamente, la radical mendocina Pamela Verasay, quien responde al gobernador Alfredo Cornejo (Mendoza) y el oficialista José Luis Espert, con línea directa con el presidente Javier Milei.
La protesta de los gremios fue la excusa del Gobierno para retomar el debate de la privatización de Aerolíneas. Foto: Fernando de la Orden.La reunión comenzó a las 11:15, tiene como expositores al vicejefe de Gabinete, José Rolandi; y el secretario de Transporte, Franco Mogetta; mientras que el presidente de Aerolíneas, Fabián Lombardo, pegó el faltazo por «problemas de agenda». Los funcionarios deberán defender el plan de privatización de la empresa, algo que Milei trató de impulsar con la Ley Bases, pero que se frustró en el Senado por la falta de acompañamiento de los dialoguistas patagónicos.
Durante el debate, Rolandi arrancó la defensa del proceso de venta de Aerolíneas remarcando que en la agenda del Gobierno está la privatización de las empresas estatales porque hay una decisión de que «el Estado no tenga un rol empresario en la sociedad».
Rolandi defendió la privatización de Aerolíneas: «El Estado es un pésimo administrador de empresas»
El funcionario explicó que cuando se bajó a Aerolíneas del capítulo de privatizaciones de la Ley Bases se dejó en claro que la intención era dejarlo para «un momento posterior». «La coyuntura que se vive en el mercado nos dice que el momento es hoy», completó.
«El Presidente fue claro y estamos convencido de que el Estado es un pésimo administrador de empresas», insistió el segundo de Guillermo Francos, para apuntar que la empresa demanda «más de $ 8000 millones de dólares» al Estado nacional. «Tenemos 80 aviones y pagamos el equivalente de 900 aviones», añadió el vicejefe de Gabinete, quien también cuestionó los convenios laborales porque «no se ajustan» al resto del mercado.
«Lo que queremos es evitar que una futura dirigencia de la Argentina vuelva a establecer una tiranía en la industria aerocomercial», afirmó el representante del Gobierno.
Por su parte, Mogetta explicó que el Gobierno busca que «Aerolíneas Argentina sea competitiva con las mismas reglas que las otras compañías». «La distorsión que generó el monopolio no ha favorecido a Aerolíneas».
Hernán Lombardi cargó contra Pablo Biró: «Se cree el rey del cielo»
En la apertura de la reunión, Hernán Lombardi, promotor de la propuesta que apoya el Gobierno advirtió que la privatización no será suficiente «sin un cambio de las relaciones laborales dentro de Aerolíneas Argentinas».
«Si mantenemos a un señor que se cree el rey de los cielos y decide cuando volamos, no vamos a cambiar de fondo», advirtió el diputado del PRO, para referirse sin mencionarlo explícitamente al titular de APLA, Pablo Biró. Pero en este sentido, el ex ministro de Cultura durante el gobierno de Cambiemos de Mauricio Macri, reclamó: «Terminemos con los chantajes de una vez por todas porque no da para más».
Asimismo, el diputado protestó porque la empresa aérea se convirtió «en el cepo del turismo en la Argentina». Para fundamentar su postura planteó que la compañía «tiene la conectividad más baja de América Latina».
El oficialismo busca un debate exprés en Diputados
Previo al plenario, el presidente de la Cámara, Martín Menem, se reunió con los funcionarios del Gobierno en el primer piso del palacio. Desde la oficina del riojano dejaron trascender que «desean» sacar dictamen en la misma jornada para llevarlo al recinto el próximo miércoles 2 de octubre, pero la presión de la oposición podría frustrar el objetivo del Gobierno.
El kirchnerismo, que puso como vicepresidente de la comisión de Transporte al massista Diego Giuliano, ex ministro del área durante el gobierno de Alberto Fernández, ya anticipó su intención de convocar al menos tres reuniones para conocer la opinión de distintos especialistas antes de emitir dictamen. En el arranque del debate, los diputados de Unión por la Patria se mostraron con carteles que decían: «Los cielos no se venden, Aerolíneas se defiende».
Obviamente, los K rechazan la privatización de Aerolíneas e incluso Máximo Kirchner llegó a impulsar un proyecto para blindar la compañía de una posible venta antes del triunfo de La Libertad Avanza en las elecciones del año pasado.
La mendocina Pamela Verasay -en el recinto junto a Martín Tetaz- será la encargada de presidir el plenario de comisiones que tratará la privatización de Aerolíneas. Foto: Federico López Claro.El temario del plenario de Diputados incluye dos proyectos; uno impulsado por Hernán Lombardi (PRO) que -como informó este diario- cuenta con el aval del Gobierno y otro que lleva la firma de Juan Manuel López (Coalición Cívica). Las propuestas son básicas porque en rigor lo que hacen es declarar a Aerolíneas Argentina como empresa sujeta a privatización y encomienda al Ejecutivo a avanzar con el procedimiento.
La propuesta de privatización es apoyada no sólo por el oficialismo sino también por su habitual socio el PRO, el bloque que encabeza Cristian Ritondo y donde hay consenso entre las distintas corrientes para votar la propuesta en el recinto.
También cuenta con el acompañamiento de la mayoría del bloque radical que comanda Rodrigo de Loredo, pero aún no está claro cómo votará el bloque Encuentro Federal, que preside Miguel Angel Pichetto, que como ocurrió durante el tratamiento de la Ley Bases tiene posiciones divididas.
El kirchnerismo como la izquierda y algunos sectores federales mantienen su rechazo a la privatización por lo que la discusión está abierta.
Otra historia será en el Senado, donde legisladores de los bloques dialoguistas, en su mayoría representantes de las provincias patagónicas forzaron al Gobierno a retirar no sólo a Aerolíneas sino también al Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina del paquete de empresas a privatizar, medida que luego fue ratificada en la Cámara baja cuando regresó la Ley Bases para su aprobación definitiva.