Si de algo hay certezas es que la reina Máxima Zorreguieta es el centro de atención en todos los eventos a los que asiste. Esto no es solo por su carisma y simpatía, sino también por sus outfits. Siempre se viste acorde a sus eventos del día y aunque se mantiene dentro de los códigos de vestimenta que establece el protocolo, encuentra la manera de destacarse y reflejar, a través de su ropa, su estilo y personalidad.
El miércoles, tras una intensa jornada laboral, la reina cerró su día con una gala. Junto a su marido, el rey Guillermo Alejandro fueron los anfitriones de la cena anual para el Cuerpo Diplomático que se realizó en el Palacio Real de Ámsterdam. Como de costumbre, Máxima Zorreguieta y su outfit dieron mucho de que hablar. La monarca deslumbró con un espectacular look total red que combinó con una de las tiaras más importantes de su colección.
Como todos los años, el miércoles 5 de junio los reyes de los Países Bajos abrieron las puertas del Palacio Real para recibir a los integrantes del Cuerpo Diplomático en el marco de la cena anual. Y lo cierto es que los looks de los monarcas no pasaron inadvertidos. Mientras el rey lució muy elegante con un frac negro, la reina se robó todas las miradas con un espectacular vestido rojo de manga larga con un tajo en la falda. Se trató de un diseño de Natan – su firma de cabecera – el cual ya usó en varias oportunidades.
La reina optó por un look monocromático que completó con unas sandalias con tirantes y una cartera con brillantes en un tono bordó. Pero, sin duda, la pieza más destacada fue su deslumbrante corona. Eligió el modelo conocido como “cola de pavo”, un espectacular diseño en plateado con piedras bordó. Incluso usó el set completo con el collar y los aros.
Un detalle no menor es que actualmente Zorreguieta comparte esta pieza ancestral con su hija mayor, la princesa Amalia. Esta fue la primera corona que la futura reina de los Países Bajo llevó sobre la cabeza. La usó en junio del año pasado, cuando asistió, junto a sus padres, a la boda del rey de Jordania. Asimismo, volvió a llevarla en abril de este año para el banquete de estado que se organizó en el Palacio Real en honor al rey Felipe VI y la reina Letizia.
El miércoles, la reina tuvo una agenda muy completa. Antes de oficiar de anfitriona en el Palacio Real y calzarse su corona, cumplió con dos compromisos. Primero visitó la escuela VMBO ‘t Venster, en la ciudad de Arnhem, donde conversó con los estudiantes sobre sus actividades diarias y sus proyectos en moda y arte. Después, se trasladó a la ciudad de Velp para visitar el Tour de Estudiantes de Mind Us, en la Astrum College, donde mantuvo charlas tanto con alumnos como con docentes sobre temas relacionados con la salud mental.
Para cumplir con estos compromisos solidarios, optó por un outfit elegante pero cómodo. Lució una blusa manga larga en color blanco hueso con unos pantalones rectos en azul marino. ¿El toque distintivo? Los aros con piedras y brillos que combinaban a la perfección con los colores de la ropa.
LA NACION